jueves, 3 de abril de 2025

Recomendaciones para la Implementación de la Acción Comunicativa en la Gestión Social: Para la academia y centros de investigación

 Las instituciones académicas y centros de investigación pueden contribuir significativamente a la implementación de enfoques de gestión social basados en la acción comunicativa a través de la generación, sistematización y difusión de conocimientos relevantes. Para estos actores, se recomiendan las siguientes acciones:

a)      Desarrollar investigaciones aplicadas sobre la gestión social de proyectos de alto impacto, generando evidencia empírica sobre lo que funciona y lo que no en diferentes contextos. Esto incluye estudios de caso, evaluaciones de impacto, análisis comparativos y otras aproximaciones metodológicas que permitan comprender mejor los factores que influyen en el éxito o fracaso de diferentes estrategias y prácticas. Es importante que estas investigaciones aborden tanto dimensiones técnicas como políticas, culturales y éticas de la gestión social, ofreciendo miradas integrales sobre fenómenos complejos.

 

b)     Formar profesionales con capacidades para implementar enfoques de gestión social basados en la acción comunicativa. Esto implica desarrollar programas académicos interdisciplinarios que integren conocimientos de ciencias sociales, comunicación, gestión de proyectos y áreas técnicas específicas, con énfasis en habilidades prácticas como facilitación, mediación, investigación participativa o comunicación intercultural. Es fundamental que esta formación incluya experiencias directas en contextos reales, a través de prácticas profesionales, proyectos de vinculación con el medio o investigaciones colaborativas con comunidades y organizaciones.

 

c)      Ofrecer acompañamiento técnico a comunidades, empresas y entidades gubernamentales en procesos de gestión social. Esto incluye servicios de asesoría, capacitación, facilitación o evaluación que pongan el conocimiento académico al servicio de necesidades concretas de los actores involucrados en proyectos de alto impacto. Es importante que este acompañamiento se realice desde una posición de independencia crítica, aportando perspectivas fundamentadas que puedan enriquecer el diálogo sin alinearse automáticamente con los intereses de ninguna de las partes.

 

d)     Crear espacios de diálogo y reflexión donde diferentes actores puedan intercambiar experiencias y perspectivas sobre la gestión social. Esto incluye seminarios, conferencias, talleres o comunidades de práctica que reúnan a representantes de empresas, gobiernos, comunidades y sociedad civil para discutir desafíos comunes, compartir aprendizajes y explorar soluciones innovadoras. Las instituciones académicas pueden jugar un rol valioso como facilitadoras de estos espacios, ofreciendo entornos neutrales y metodologías que promuevan intercambios constructivos entre actores que normalmente interactúan en contextos más conflictivos o formales.

 

e)      Desarrollar y difundir herramientas metodológicas que faciliten la implementación práctica de enfoques de acción comunicativa. Esto incluye guías, manuales, protocolos, software u otros recursos que puedan ser utilizados por diferentes actores para mejorar sus prácticas de comunicación, participación, resolución de conflictos o evaluación participativa. Es importante que estas herramientas se desarrollen de manera colaborativa con sus potenciales usuarios, asegurando que respondan a necesidades reales y que sean accesibles y adaptables a diferentes contextos.

 

f)       Promover la transdisciplinariedad y el diálogo de saberes en la generación de conocimientos sobre gestión social. Esto implica reconocer y valorar diferentes formas de conocimiento, incluyendo saberes tradicionales, experienciales y prácticos junto con conocimientos académicos y técnicos, buscando complementariedades y sinergias entre ellos. Es fundamental superar enfoques extractivistas de investigación donde las comunidades son meros objetos de estudio, para avanzar hacia modelos colaborativos donde todos los participantes aportan y se benefician del proceso de construcción de conocimiento.

 

g)      Incidir en políticas públicas y prácticas empresariales a partir de la evidencia generada por la investigación. Esto incluye participar en espacios de discusión normativa, elaborar recomendaciones fundamentadas para tomadores de decisiones, y difundir hallazgos relevantes en formatos accesibles para diferentes audiencias. Es importante que esta incidencia se realice desde una posición de rigor académico y compromiso ético con el bienestar de las comunidades y la sostenibilidad de los territorios, aportando miradas críticas y propositivas que contribuyan a mejorar las prácticas de gestión social.

 

La implementación de estas recomendaciones requiere un compromiso sostenido por parte de todos los actores involucrados, así como la disposición a cuestionar y transformar prácticas, estructuras y culturas arraigadas que pueden obstaculizar el desarrollo de enfoques de gestión social basados en la acción comunicativa. No se trata de cambios que puedan lograrse de la noche a la mañana, sino de procesos graduales que demandan paciencia, perseverancia y apertura al aprendizaje continuo. Sin embargo, las experiencias analizadas en este documento demuestran que estos cambios son posibles y que sus beneficios justifican ampliamente los esfuerzos invertidos, tanto para las empresas y organizaciones promotoras de proyectos como para las comunidades y territorios donde estos se desarrollan.

 

No hay comentarios.: