sábado, 29 de enero de 2011

POR LA TROCHA

La mayoría de personas que deben desplazarse con frecuencia entre Bucaramanga y Barrancabermeja, han denominado al sitio donde ocurrió el hundimiento de la calzada como “la trocha”, pues durante varias semanas fue un camino abierto por el que debían exponerse caminando alrededor de una hora entre la maleza y el barro.

Hoy este tramo ya lo han habilitado, de manera restringida, para el paso de vehículos pequeños los cuales deben esperar a lado y lado varias horas antes de que autoricen el paso, primero en un sentido luego en el otro. Muy bien por el gobernador y el alcalde de Barranca que le pusieron la cara a esta situación y lograron gestionar esta solución transitoria. Al alcalde de Bucaramanga nunca se le vio en estas angustias a pesar de que vive proclamando la llamada Ciudad Región (¿?).

Sin embargo hay una cosa que preocupa aun más y es que casi toda la carretera Barranca-Bucaramanga parece una trocha. La carretera es una montaña rusa, con derrumbes y huecos en todo el trayecto, y aun nadie se ha pronunciado de manera clara sobre la alternativa vial que comunique estas dos importantes ciudades de Colombia; y mientras tanto los usuarios de la vía deben seguir en un verdadero viacrucis para pasar de un lado a otro.

En medio de toda este drama de la carretera que se da en el marco de la tragedia invernal que ha dejado millones de damnificados en todo el país, han brillado por su ausencia los llamados representantes del pueblo: no se ha visto a un solo congresista o diputado pronunciándose sobre lo acontecido, pidiendo cuentas y mucho menos proponiendo soluciones. ¿Dónde están todas esas almas de dios que en elecciones van de pueblo en pueblo pregonando su interés incondicional por el bienestar de las mayorías? Creo que la mayoría estuvo en sus tranquilas, seguras y secas fincas o en algún seguro, tranquilo y seco país europeo o de Norteamérica.

Donde están aquellos que en campaña se proclamaron como los mejores amigos del departamento y que nos conducirían a un país mejor, o aquellos que proclamaban que Santander siempre estará adelante, o los que nos proponían avanzar juntos?; y ¿dónde están nuestros diputados? ¿Algún ciudadano común sabe quiénes son y qué hacen? Claro, eso no debe preocuparnos pues este año tendremos elecciones y hacia el mes de abril comenzarán a salir todos estos próceres dispuestos a sacrificar su tranquilidad y comodidad particular para prestarle un servicio a la ciudad y al departamento. Ya los veremos abrazando viejitas, alzando niños con mocos y recorriendo las provincias muy preocupados por su desarrollo.

Los que si se han manifestado de manera diligente son los empresarios que adelantan la campaña “Dale la mano a Santander” con la cual ya se han recaudado más de 1.600 millones de pesos y se proponen recaudar tres mil millones para coadyuvar en la superación de la tragedia invernal en el departamento. También los ciudadanos de a pie se han puesto las botas para ayudar con la campaña “Sombrillas Abiertas” que ha llevado ayuda concreta a los damnificados del corregimiento san Rafael de Lebrija en el municipio de Rionegro.

De nuestra clase política seguiremos esperando soluciones estructurales a los problemas de Santander, por ahora ya sabemos que todos vendrán a prometernos la pavimentación de todas las vías como lo vienen haciendo desde siempre.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Ojo porque Carlitos Rojas lo puede estar demandando por plagio del eslogan, "Demosle una mano a Floridablanca"